Diseño de packaging para el nuevo vino de Bodegas Bigardo, Calma, por Javier Garduño Estudio de Diseño. El nombre se debe a que el cliente les dijo que era un vino “tranquilo”.
Para la etiqueta crearon una imagen de un buda, símbolo de paz y tranquilidad, haciendo el gesto de los cuernos (logotipo e imagen de la bodega) y por detrás un mandala en oro para potenciar la idea de tranquilidad.
En el collarín, hay una cinta de color stamping oro para unificar con todos los vinos de la bodega.