La situación creada por la grave pandemia de coronavirus ha motivado la adopción de medidas extraordinarias para luchar contra la enfermedad, inicialmente a través de la declaración del estado de alarma y, posteriormente, con la aprobación del Real Decreto ley 10/2020.
La industria productiva española genera hoy el 13% del PIB y el 12% del empleo de forma directa, si bien sus efectos indirectos e inducidos alcanzan respectivamente, el 43% de la riqueza y el 30% del empleo. La industria es también responsable del 92% de las exportaciones de mercancías y de más del 50% de la inversión privada en investigación, innovación y desarrollo tecnológico.
Desde la Alianza por la Competitividad de la Industria Española -constituida por ANFAC (automoción), AOP (refino), ASPAPEL (papel), FEIQUE (química y farmacia), FIAB (alimentación y bebidas), OFICEMEN (cemento) y UNESID (siderurgia)– consideran que es necesario impulsar progresivamente el resto de actividades industriales y el sector de la construcción, para que ejerzan su fundamental papel tractor de la economía, adoptando medidas urgentes que paralelamente estimulen la demanda y la competitividad de las empresas.
En este sentido, estiman que es improrrogable que la Vicepresidencia Económica del Gobierno y el Ministerio de Industria activen y lideren un programa de medidas de rápida implantación, apoyadas en cinco ejes:
• Impulsar la inversión pública en infraestructuras, vivienda pública y rehabilitación;
• Estimular de forma efectiva la demanda del automóvil;
• Reducir de forma coyuntural las cargas impositivas de los sectores sometidos a competencial internacional;
• Adoptar medidas que incidan en la reducción de los costes vinculados a la energía, tales como la suspensión del impuesto de generación 15/2012, o la garantía de compensación de los costes indirectos de CO2;
• Promover medidas que favorezcan el acceso a los mercados internacionales y potencien la actividad exportadora.
Desde la Alianza consideran imprescindible el establecimiento de un programa concreto de medidas capaces de incrementar la demanda a nivel nacional y mejorar la competitividad de nuestras empresas en el mercado internacional.