Rémy Guizerix quería crear un nuevo vodka directamente de la mente del artista. Además de centrarse en ingredientes de alta calidad y procesos elaborados, el fundador de Remyx Vodka también proporcionó a su creación un aspecto sorprendente.
El diseño de la botella se desarrolló en colaboración con el artista francés Kikor. Junto con CCL Label, encontraron la solución de decoración perfecta. El sleeve retráctil impreso en huecograbado cautiva a los consumidores gracias a la combinación de colores vivos y el efecto de superficie mate. El frasco Moonea de Selective Line (Verallia) viste este primer vodka del Cosmos.
