ALPLA trabaja en una solución para el material reciclado de HDPE apto para uso alimentario. Está evaluando el proceso patentado basado en disolventes en una planta piloto en Heerenveen, en colaboración con el instituto tecnológico independiente NTCP. El proyecto de innovación, financiado por el Ministerio de Política Climática y Crecimiento Verde de los Países Bajos, tendrá una duración de cuatro años. Justo a tiempo para el inicio del PPWR 2030, la solución innovadora se ampliará a la producción industrial.
A partir de 2030, los envases en la UE deben contener una proporción mínima de material reciclado. ALPLA y NTCP trabajan en una solución a prueba de futuro y asequible para los envases plásticos de alimentos. Se espera que la tecnología de reciclaje patentada permita producir material reciclado de HDPE (rHDPE) apto para uso alimentario a escala industrial por primera vez. Tras varios años de I+D con resultados satisfactorios en laboratorio, los dos socios del proyecto acaban de comenzar a evaluar el proceso basado en disolventes en la planta de NTCP en Heerenveen.
Se realizarán pruebas intensivas de todas las etapas del proceso de la tecnología patentada como parte de un proyecto de innovación colaborativo. El objetivo es obtener la aprobación de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (AESA) próximamente. La construcción y operación de la planta piloto proporcionará información valiosa para la ampliación del proceso. ALPLA ha creado su propia empresa de reciclaje en los Países Bajos para este fin.
“Hasta la fecha, no existe ningún proceso certificado en la UE para la producción de material reciclado de HDPE de grado alimentario. Nuestra tecnología altamente eficiente para la limpieza y el procesamiento de material reciclado posconsumo podría ser un verdadero punto de inflexión”, explica Michael Heyde, director de la División de Reciclaje Tecnológico de ALPLA.
La empresa ya produce material reciclado de PET y HDPE en su propia división de reciclaje en 14 ubicaciones en todo el mundo, con una capacidad de producción de reciclaje instalada y proyectada de 400 000 toneladas. ALPLA procesa la mayor parte de este material para fabricar envases. La futura industrialización de esta innovadora tecnología debería facilitar la disponibilidad de envases alimentarios de rHDPE para el mercado de bienes de consumo de alta rotación (FMCG).
«Esta colaboración con ALPLA se ajusta perfectamente a las actividades principales y a la misión de NTCP como instituto de conocimiento independiente, para facilitar y acelerar el desarrollo tecnológico con empresas pioneras. Creemos que se necesitan nuevas tecnologías para cerrar completamente la cadena de valor del plástico y, al mismo tiempo, reducir la cantidad de residuos», subraya Martine Brandsma, directora general de NTCP.
El proyecto piloto se está llevando a cabo con el apoyo del Ministerio de Política Climática y Crecimiento Verde de los Países Bajos.
Pie de foto: Michael Heyde (ALPLA) and Martine Brandsma (NTCP)














