Las compañías farmacéuticas asentadas en España están innovando de manera más eficiente, reduciendo la huella ambiental de la producción, reforzando la transparencia y fomentando relaciones más sólidas y equitativas con pacientes, profesionales sanitarios, administraciones públicas y el conjunto de la sociedad. Así lo refleja el informe Sostenibilidad en cifras: impacto social y ambiental de la industria farmacéutica 2025, presentado recientemente en Madrid.
Este informe recoge los resultados de la primera encuesta sobre el desempeño medioambiental de las compañías farmacéuticas asentadas en España, que ha realizado Farmaindustria y que ha contado con las respuestas de 55 laboratorios que representan el 60% del mercado en nuestro país. Entre las conclusiones de esta encuesta, destacan que el 82% de las compañías cuentan con estrategias de economía circular; el 62% calculan, directa o indirectamente, su huella de carbono; que el 57% tienen objetivos de reducción de emisiones basados en la ciencia, y que más del 50% emplean materiales reciclables o certificados FSC (gestión forestal).
“Los principales retos del futuro inmediato son la reducción de emisiones de alcance 3, el avance en economía circular y química verde, la gestión eficiente de agua y residuos y la asequibilidad de los tratamientos. Todo ello en un contexto donde las compañías deben continuar su labor en I+D, responder a crisis sanitarias globales y mantener la competitividad en un mercado internacional cada vez más exigente. Estos desafíos representan también una oportunidad para liderar la transición hacia un modelo más sostenible, aprovechando la digitalización, la inteligencia artificial y las colaboraciones sectoriales que refuerzan su resiliencia y su capacidad para generar confianza”, afirmó Juan Yermo, director general de Farmaindustria.
La otra gran novedad de este segundo informe sectorial es la inclusión de los resultados del estudio sobre compromiso social de las compañías farmacéuticas en España, realizado por la Fundación SERES y McKinsey.
Según Fernando Ruiz, presidente de la Fundación SERES, “los próximos años serán extremadamente relevantes, para gestionar empresas bajo estrategias que ponen el foco en los factores ESG, sobre todo, si hablamos de impacto social. Medirlo y comunicarlo será fundamental. Para continuar aportando valor a las empresas SERES, hemos creado el Mapa SERES de Huella Social, una metodología de medición del impacto social que permite cuantificar el impacto de la actividad económica de una empresa en sus clientes, en sus empleados, sus proveedores y las comunidades en las que opera, facilitando la comparabilidad con visión sectorial. Un proyecto en el que estamos involucrando a la industria farmacéutica, uno de los más importantes en la economía española. Miramos al futuro con la certeza de que el valor social seguirá siendo la clave para alcanzar la excelencia empresarial”.
Finalmente, en materia de buen gobierno, el informe subraya que la gobernanza en la industria farmacéutica se ha fortalecido con nuevas iniciativas adaptadas a los retos actuales, como el Código de Conducta regulador del tratamiento de datos personales en ensayos clínicos y farmacovigilancia, aprobado en 2022 por la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD), que convirtió al sector en el primero de Europa con un código sectorial aprobado bajo el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD). Este Código ya cuenta con 30 entidades adheridas, en su mayoría compañías farmacéuticas que representan más del 80% de los ensayos clínicos que se desarrollan en España.
Por otra parte, las alianzas estratégicas con entidades sociales y medioambientales, como la Fundación ”la Caixa”, el Grupo Social ONCE o SIGRE, refuerzan la conexión del sector con la sociedad y consolidan un modelo de buen gobierno responsable basado en la corresponsabilidad y el valor compartido.
Pie de foto: Fernando Ruiz (Fundación SERES), Guillermo de Juan (GSK), Teresa Millán (Lilly) y Tomás Olleros (Farmasierrra).














